10 agosto, 2009

Picada # 5: The rise of the calentitos

06/08/09


Nuevo encuentro, pero el primero registrado, por esas cosas de la interné y la colgadez humana que hacen que uno se acuerde de llevarse un souvenir recién cuando ya se fue de Puerto Madryn.

A pesar de algunas bajas a último momento que redundaron en un exceso de comida para los "7 locos", la noche transcurrió en un continuo picotear de comestibles. Uno como organizador se sorprende al averiguar que las cosas menos pensadas como croquetitas de papa y queso van a ser los jugadores fuertes de una comida. Pero no dejemos fuera de la ecuación a las brochettitas de carne o a las empanadas caprese que en su conjunto formaron lo que se denomina "calentitos", un hito dentro de estas crónicas picantíles.

Pero como el paladar dice "dame caliente, pero frío también", y uno al paladar no puede menos que escucharlo, también hemos sumergido más de una papa frita en salsas de cebolla de verdeo, hemos untado twistos (cuyo consenso fue: "son muy grasosas") con barbacoa (según invento por el señor M. Ribotta) y mojado nachos en la salsa de doritos (personalmente, una de mis cosas favoritas). No quiero olvidarme de nadie, asique señores embutidos y fiambres, aquí van: leber, jamones crudos y cocidos, salamín (mmm) y quesos de tres variedades.

Si bien es cierto (como en Las Vegas) que todo lo que se habla en las picadas, se queda en las picadas, es mi deber como Ciudadano (con C mayúscula) resaltar algunos puntos interesantes de nuestro coloquio. Entre ellos la posibilidad (ya lejana) de que Juampi trabajara como observador del Planeta Tierra, el grupo de picadas y la barba (y por qué Willy tiene barba de persona que le gusta bailar YMCA), Pano y sus fotos de rubias, los tiempos minúsculos de estudio del Vasco, mi necesidad urgente de tocar algún ojete femenino (con todo respeto) y las teorías estadísticas de Juampi sobre la Infidelidad en grupos grandes de hombres.

No menor agasajo fue la película que disputó su lugar con otros clásicos del séptimo arte como: "Mi novia es un travesti" y "Adictos al sexo". Como estabamos en sintonía con los asiáticos, dijimos: Batalla Real (o Battle Royale como le dicen).


"Hola, mi nombre es Chigusa y mi actor favorito es Osvaldo Lapór.
Cuando no estoy matando a mis compañeros de clase me gusta
el macramé y cocinar con el gordo japonés del Gourmet."

Festín de sangre. Cuando tenés un profesor como el que le tocó a ellos, mejor hacéle caso. El punto más importante de la película es que no podés confiar en nadie, y que si llega la hora de decidir entre tu vida y la de los demás, siempre vas a decidir vivir vos y matar a los demás, a menos que ya hayas participado de alguna masacre parecida y tu novia te haya sonreído y no hayas entendido por qué te sonreía y ahora quieras saber por qué y te alíes con 2 personas para ver si de última ellos te pueden matar, siempre considerando que antes tenés que engañar a los organizadores de BR para que no te exploten el cuello por haber quedado 3 personas sobrevivientes cuando sólo podía haber quedado 1. Ah, y por ahí el profesor era el padre de una de las chicas. O por ahí no. Y los nerds se esforzaron al pedo.

Me como el último bizcocho y chau.



Redacción: Nacho